Hinchas de Boca empapelaron negocios con afiches del descenso de River y hay bronca de comerciantes
Este fin de semana decenas de locales amanecieron inundados de carteles con cargadas por el décimo aniversario del descenso “Millonario”. Los trabajadores tuvieron que limpiar el enchastre ocasionado por el pegamento en paredes y vidrieras. “Los negocios ya veníamos hechos pelota y ahora nos hacen esto”, lamentó un comerciante.
Este 26 de junio se cumplieron diez años del histórico descenso de River a la Primera B Nacional y como no podía ser de otra manera, los hinchas de Boca aprovecharon la ocasión para cargar a sus clásicos rivales. En varios lugares de Zona Norte se vieron en la madrugada algunos afiches alusivos a aquella tarde en 2011 en el Monumental, cuando Belgrano de Córdoba consiguió el ascenso a Primera.
"10 años y todavía no me dijiste: ¿Qué se siente? Esa mancha no se borra nunca más", rezaba uno de los carteles con las imágenes de jugadores e hinchas destrozados de dolor y un fantasma de la B al lado del escudo de River. Las cargadas se replicaron en distintos municipios de la Zona Norte pero en el municipio de San Miguel, las bromas cruzaron todos los límites y generaron bronca entre comerciantes.
Es que los negocios del municipio amanecieron empapelados con carteles, generando serios trastornos para los comerciantes y trabajadores de la zona. “No se que culpa tenemos los comercios de semejante enchastre y aberración. Esto no puede pasar. ¿Tanta maldad se puede tener? Más allá de una cargada estos se pasaron de la raya”, señalaron los empleados de heladería La Suizo.
“Los que pegaron los carteles son unos papanatas que seguro dirán que es el folclore del fútbol. Los comercios ahogados y cuatro muchachos aburridos salen a perjudicar más a los comerciantes que ya vienen hechos pelota”, lanzó el comerciante Luis Greco. “Muchachos, peguenlos en su casa. No perjudiquen más a los que están destrozados”, expresó el hombre.
Según pudo constatar ZonaNorteHoy, los afiches aparecieron pegados en pequeños comercios, bares, bancos y hasta en una sucursal de Mc Donald’s. Durante todo el fin de semana, algunos trabajadores estuvieron trabajando en paredes y vidrieras tratando de limpiar el enchastre provocado por el pegamento. Los comerciantes se mostraron ofuscados y reclamaron más controles por parte de la Policía y del municipio.
