Crisis en la industria del electrodoméstico: suspensiones, despidos y plantas al 50% ponen en alerta a más de 600 trabajadores
La caída del consumo, la competencia de productos importados y el estancamiento económico golpean con fuerza al sector del electrodoméstico. Electrolux prorrogó suspensiones para 400 operarios y Mabe despidió a más de 200 trabajadores, mientras otras fábricas reducen actividad y operan a media capacidad en todo el país.
La industria argentina del electrodoméstico atraviesa uno de sus momentos más críticos de los últimos años. La combinación de ventas en caída, ingreso acelerado de productos importados y un escenario macroeconómico recesivo provocó un impacto directo en fábricas de Santa Fe, Córdoba, San Luis y Buenos Aires, afectando a más de 600 trabajadores entre suspensiones, reestructuraciones y despidos.
Electrolux: suspensiones prorrogadas y actividad mínima en Rosario
En Rosario, Electrolux decidió extender hasta el 31 de diciembre de 2025 el esquema de suspensiones rotativas para unos 400 operarios. La medida fue acordada con la UOM para evitar despidos masivos y sostener la estructura productiva en un contexto de ventas desplomadas.
Fuentes internas advierten que la planta trabaja con actividad mínima, lo que genera una creciente incertidumbre en las familias del cordón industrial santafesino.
Mabe: 200 despidos y un proceso de reestructuración en Córdoba
En Córdoba, la empresa Mabe anunció la reestructuración más severa del sector:
más de 200 empleados despedidos,
reorganización interna,
fusión de operaciones en dos sedes principales.
A partir de ahora:
- Luque quedará como la planta central de producción de lavarropas, secarropas y cocinas.
- Río Segundo se transformará en un centro de servicios, almacenamiento y control de calidad.
En paralelo, la planta de San Luis, especializada en heladeras, seguirá funcionando pero con una reducción del 40% de su capacidad, donde trabajan unas 300 personas.
Traslados, retiros voluntarios e indemnizaciones
El gerente de Relaciones Institucionales de Mabe, Alejandro Iglesias, explicó que ambas plantas trabajaban al 50% de su capacidad, lo que hizo necesario concentrar la producción.
Sobre el personal:
- De los 250 empleados de Río Segundo, más de 30 aceptaron retiros voluntarios.
- A los demás se les ofreció trasladarse a Luque con transporte a cargo de la empresa.
- Quienes no acepten el traslado podrán optar por un acuerdo con 110% de indemnización.
La compañía también recordó sus inversiones por u$s 25 millones en Luque para mejorar competitividad y alinearse a los precios internacionales.
El sector del electrodoméstico, en modo supervivencia
La situación de Electrolux y Mabe refleja un fenómeno que se repite en toda la industria. Actualmente, la mayoría de las fábricas nacionales opera al 50% o 60% de su capacidad, afectadas por:
- caída de ventas,
- precios más competitivos de productos importados,
- estancamiento económico prolongado,
- baja demanda del mercado interno.
Algunas compañías incorporaron productos importados para mantener su participación comercial, aunque el objetivo principal sigue siendo sostener la producción local y evitar despidos masivos.
Las empresas que siguen apostando a fabricar en el país
Pese al panorama adverso, varias firmas mantienen líneas activas y continúan produciendo:
Longvie - cocinas, calefones, termotanques y lavarropas
Visuar - lavarropas Samsung
Autosal - marcas Kohinoor y Columbia
Briket - equipos de refrigeración (Rosario)
Bambi - heladeras y freezers
Estas empresas aseguran que su prioridad es sostener el empleo, mantener la producción nacional y atravesar la crisis sin recurrir a despidos masivos.
Con plantas trabajando a media máquina, suspensiones extendidas y más de 600 familias pendientes de una reactivación, la industria del electrodoméstico enfrenta un final de año marcado por la incertidumbre. El sector espera que las reformas económicas y laborales prometidas por el Gobierno logren mejorar la competitividad y frenar el avance de las importaciones.









