Escasa actividad se registró en Ramallo como consecuencia del paro nacional
“Es como un sábado a la mañana, así es la situación del paro nacional en Ramallo” explicó un vecino sobre la medida de fuerza que llevó adelante la CTA de Pablo Micheli y el sector de la CGT liderado por Hugo Moyano. Sin administración pública municipal –trabajó Anses y Arba-- ni bancos, y con un dispar acatamiento por parte de las estaciones de servicio la imagen mostraba a la ciudad de Ramallo y Villa Ramallo con menor actividad en las calles. A esto hay que sumarle una importante cantidad de docentes que decidieron adherir por voluntad propia más allá de la protesta que llevará adelante el jueves y viernes próximo el Frente Gremial Docente integrado por FEB y SUTEBA.
Gran parte del comercio trabajo normalmente, tanto a la mañana como por la tarde y no se produjeron piquetes o retenes en el transito en ninguna de las rutas provinciales o la ruta nacional 9. Desde el sector agropecuario se informó que adherían a la protesta que llevaba adelante la Federación Agraria Argentina en la ciudad de Pergamino.
El transporte, de colectivos local y de media distancia circulaban con normalidad, en tanto que los trabajadores agremiados en la UOM (Unión Obrera Metalúrgica) y UOCRA (Unión Obrera de la Construcción Argentina) trabajaron normalmente.
Por su parte en la empresa Bunge los trabajadores del gremio de aceiteros que conforman el 60% de la planta, adherían al paro con un cese total de actividades. En tanto que una parte de los trabajadores nucleados en el gremio Urgara, que cumplen tareas en la zona de calada, torre de ingreso, de control y volcadora se habían plegado al paro con los aceiteros y otros se presentaron a cumplir con su turno. Quienes no adhirieron fueron los dos gremios de fertilizantes cuyos trabajadores cumplían con sus tareas normalmente.
En tanto, en la Municipalidad de Ramallo y en el hospital local, no se registraron actividades, solo la atención de las emergencias. Finalmente en horas del mediodía, tanto la ciudad de Ramallo como Villa Ramallo terminaron empapeladas de panfletos con consignas que van desde la crítica al agravio hacia el gobierno nacional sin tener ningún sector político o gremial que firmara el papel. Cabe destacar que hasta el momento de redactar este informe no se había producido episodio de violencia o hechos de vandalismo.