Royon afirma que su área no piensa en el "calendario electoral" sino a largo plazo

"Desde la cartera y yo como secretaria de Energía tengo un gran compromiso de que todas las obras que se hacen, se hagan con la prioridad de lo que Argentina necesita y no del calendario electoral. Tenemos obras de infraestructura en las que estamos pensando en los próximos diez años", aseveró la funcionaria esta mañana en diálogo con Radio Nacional Folklórica.

En ese sentido, Royon dio como ejemplo las próximas licitaciones de la reversión del Gasoducto del Norte y la del segundo tramo del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK), las cuales se dejarán "con financiamiento" para que las continúe la próxima administración.

La obra de la reversión, que se licitará "en los próximos días", permitirá "enviar el gas de Vaca Muerta al norte del país e independizarnos de la importación de gas que hoy el país efectúa desde Bolivia", recordó la secretaria.

Royon, por otra parte, afirmó que hay "miradas muy diferentes" entre el oficialismo y la oposición respecto del sector energético.

"Tenemos una mirada diferente con Juntos por el Cambio en materia de desarrollo de infraestructura. En la gestión de (el expresidente, Mauricio) Macri se pararon numerosas obras y el gasoducto no se hizo sabiendo que iba a ser necesaria la ampliación de la capacidad", indicó.

Por otra parte, Royon también se distanció de la propuesta de "ausencia del Estado" del candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, y consideró que hay obras como el GPNK o las líneas de alta tensión donde "es difícil que el sector privado invierta".

Precisamente, sobre el GPNK, la titular del área energética recordó que el "impacto" se sentirá plenamente al año que viene, al haber pasado ya gran parte del invierno.

El GPNK -afirmó- permitirá "bajar prácticamente a un mínimo las compras de Gas Natural Licuado (GNL) que Argentina adquiere desde ya hace muchos años al exterior y, por otra parte, tener un costo de gas más competitivo porque el gas de Vaca Muerta es hasta tres a cuatro veces más barato del que compramos afuera, lo que va a contribuir al orden fiscal del Estado porque tendrá que aportar menos para sostener los susidios de bajos ingresos".

Respecto de este último punto, Royon reiteró que quienes tengan ingresos menores a 3,5 canastas básicas -equivalentes a "aproximadamente $ 813.500"- van a seguir recibiendo subsidios, y que, a partir de agosto, habrá un aumento de 5% a 6% en las facturas.

La secretaria indicó que uno de los objetivos del GPNK es también bajar el costo de la energía eléctrica, pues "el 60% de la generación en el país es de fuentes térmicas".

Royon destacó, en ese marco, que ayer se presentó, a través de la resolución 621/23 del Boletín Oficial, una convocatoria dirigida a presentaciones de nueva oferta térmica y de la modernización de la oferta ya existente, permitiendo "una matriz de costo más competitiva".

La idea -indicó- es que con la reducción del costo en la generación y la eventual "recuperación del salario, se pueda continuar con alguna quita de subsidios", aunque -aclaró- "esto ya sería para el año que viene".