APANNE, el centro para chicos con discapacidad que resiste los embates de Nación gracias al apoyo de la comunidad escobarense
"El único lugar que nos abrió las puertas fue APANNE", dice María Laura Rodríguez mientras abraza a su hijo Luciano, uno de los más de 30 chicos con discapacidad que asisten a diario a esta reconocida institución del partido de Escobar, cuya continuidad hoy se ve amenazada por los recortes del gobierno nacional en el área de Discapacidad y, en particular, por la exclusión de esta institución del sistema de prestadores.
En medio de este panorama, la institución recibió el respaldo de entidades de bien público locales y el acompañamiento del Municipio de Escobar, que donó 1 millón de pesos para afrontar gastos urgentes. Además, a través de su cuenta oficial de Instagram (@oficialapanne), APANNE informó que el intendente Ariel Sujarchuk y su esposa, Macarena Lemos, donaron otros dos millones de pesos que se recaudaron de sus regalos por el reciente casamiento : "Una vez más queremos agradecer la solidaridad y el acompañamiento de nuestro intendente y de su esposa", sostuvo la institución en un posteo.
La organización atraviesa una situación crítica por la falta de actualización de nomencladores que decidió la administración nacional, los recortes en pensiones y su exclusión del registro de prestadores. Esto último se dio tras una decisión de la Junta Evaluadora de Servicios de Atención a Personas con Discapacidad, que le quitó la prestación tras una inspección en su sede de Rivadavia 240 (Belén de Escobar). Desde la institución denuncian que se trató de una evaluación tendenciosa, basada en detalles no esenciales y sin otorgar tiempo para corregir los supuestos incumplimientos.
"Estamos profundamente dolidos pero comprometidos a seguir luchando para mantener este centro, que es un hogar fundamental", expresó Tony Mastronardi, presidente de APANNE, institución que también lanzó una campaña para sumar socios solidarios con un aporte mensual de $2.000. Para colaborar, los interesados pueden comunicarse vía WhatsApp al número 348 454-1001.
"Si esto se cerrara, significaría un dolor impresionante. Muchos chicos serían dejados de lado. Realmente hablamos de algo triste que trae mucho sufrimiento", cerró María Laura Rodríguez. Su testimonio, como el de tantas otras familias, muestra que detrás de cada recorte hay personas reales que quedan en situación de vulnerabilidad, sin atención y sin acceso a derechos fundamentales.