Advierten que más de 430.000 empleos están en riesgo por la apertura comercial sin estrategia
Un informe de Fundar alertó sobre el impacto laboral de las políticas de liberalización impulsadas por el Gobierno. La industria manufacturera sería la más afectada.
La apertura comercial impulsada por el Gobierno Nacional sin medidas de contención ni estrategia de desarrollo podría tener un fuerte impacto negativo en el empleo industrial. Así lo advierte un informe reciente de Fundar, una organización especializada en políticas públicas, que estima que más de 430.000 puestos de trabajo estarían en riesgo por el nuevo esquema de comercio exterior.
El estudio, titulado "Abrir sin paracaídas", señala que las importaciones podrían aumentar en más de 12.000 millones de dólares a precios de 2024, lo que provocaría una caída del 2,6% en el valor bruto de producción y del 2,2% en el valor agregado bruto de la economía. Este fenómeno afectaría especialmente al sector privado, con 431.452 empleos en peligro, lo que representa el 2,3% del total.
La industria, la más golpeada
Según Fundar, el 65% de los empleos en riesgo corresponde a la industria manufacturera, uno de los motores productivos del país. Dentro de este sector, las ramas más comprometidas son:
- Textiles, indumentaria y calzado
- Fabricación de muebles, colchones y juguetes
- Industria maderera
- Electrónica, donde en algunos segmentos como la producción de receptores de TV, el riesgo laboral supera el 90%
El informe también advierte que los efectos serán más graves en provincias industriales como Buenos Aires, Tierra del Fuego, Misiones y La Rioja. En términos relativos, Tierra del Fuego sería la más afectada, por su alta concentración de empleo en sectores expuestos a la competencia externa.
Además, la pérdida de empleos se concentraría en varones adultos jóvenes con nivel educativo medio, lo que genera preocupación sobre el impacto social del ajuste.
Apertura sin red de contención
Los especialistas de Fundar señalaron que si bien la apertura comercial puede estimular la competencia y la innovación, sus beneficios dependen de una estrategia integral de desarrollo, que hoy está ausente.
Entre los puntos clave que proponen, destacan:
- Reformas macroeconómicas, incluyendo una revisión de la carga tributaria a la producción y un tipo de cambio competitivo. Con el dólar apreciado como en abril de 2025, el impacto laboral es más alto que si se mantuvieran valores de 2023.
- Políticas industriales ofensivas, que identifiquen sectores con potencial y promuevan las exportaciones.
- Red de protección laboral, con programas de reconversión para trabajadores afectados por la competencia importadora.
- Inversión en infraestructura y ciencia, para reducir costos logísticos y frenar la fuga de talentos.
"El impacto negativo de abrir sin planificación se amplifica con un tipo de cambio apreciado y sin políticas compensatorias", concluye el estudio elaborado por Leonardo Park, Matías Gutman, Nadia Schuffer, Belén Bentivegna y Santiago Capobianco.