Abella: “Cuando miro para atrás me siento satisfecho, pero lo que falta es infinito”

Sebastián Abella, de Juntos por el Cambio, logró la reelección como intendente de Campana  con el 54% de los votos y en pocos días asumirá su segundo mandato al frente del municipio. En diálogo con ZonaNorteHoy.com, el jefe comunal evaluó el resultado electoral, habló de los desafíos para esta nueva gestión y analizó la relación que espera tener con Axel Kicillof y Alberto Fernández. 

“Creo que hemos hecho un trabajo de mucha cercanía con los vecinos”, afirmó Abella al argumentar uno de los motivos por los cuales cree que ganaron por 16 puntos de ventaja, en referencia al porcentaje que le sacaron al concejal Rubén Romano, principal competidor del Frente de Todos. Dijo que más allá de las obras que le mejoraron la calidad de vida a la gente, considera que se premió “el estar cerca”, el trabajo mano a mano entre el vecino y el intendente.  Sostuvo además, que  el vecino valoró que tuvieron una buena administración durante estos primeros cuatro años.

De cara a esta segunda etapa de gestión, el jefe comunal dijo que “le queda pendiente todo, ya que todo lo que uno hace cada día, al otro día ya quedó atrás”. Agregó que hay que levantarse diariamente a buscar nuevos desafíos y resolver los problemas de la ciudad. Sin embargo, Abella destacó que el balance de lo realizado durante estos cuatro años es positivo. “Cuando miro para atrás me siento satisfecho por todo lo que hicimos, pero lo que falta es infinito”, sostuvo.  Dijo que una de las cosas que quedaron pendientes en esta primera etapa es terminar la costanera de la ciudad, que está en un 60% de avance y que es un espacio público que los vecinos anhelan desde hace décadas. También mencionó la ampliación de la Avenida Rivadavia. Ambas obras  las tienen pensado concluir en esta nueva etapa.

Consultado sobre el impacto de la crisis en las fuentes laborales de Campana, señaló que la situación económica y laboral es muy complicada pero que están acompañando a todas las industrias y pymes de la ciudad, para que sientan el respaldo del municipio. En este marco, cuestionó al dirigente opositor Rubén Romano por las cifras de puestos de trabajo que dice que se cayeron. Abella señaló que desde el 27 de octubre que perdió esta persona no se lo vio más defendiendo a los vecinos como lo hacía hasta esa fecha y agregó: “Cuando vos tomas un compromiso social y te vota buena cantidad de gente, si te toca perder, seguí acompañando, no hagas campañas y después te borrás”.

También analizó el nuevo escenario que se presentará en el Concejo Deliberante, ya que ahora podrá gobernar con mayoría propia; y a su futuro vínculo con los nuevos mandatarios electos a nivel provincial y nacional. “Creo que Campana perdió dos años de avances en materia de ordenanzas”, señaló Abella, por lo que manifestó su deseo de recuperar ese tiempo perdido en el que los vecinos fueron perjudicados. Agregó que todas esas ordenanzas quizás hubieran mejorado en buena parte los problemas laborales y otros temas que tienen que ver con el funcionamiento de la ciudad. Respecto a la relación con los gobiernos provincial y nacional, consideró que eso empezará a vislumbrarse a partir del 10 de diciembre. “Nosotros vamos a tratar de ser un Gobierno amigable, tener la mejor relación posible”, aseveró. Agregó que “dejarán de lado el sector político al cual pertenecen para poder llevar adelante la mejor gestión para los vecinos”. Aclaró sin embargo: “el día que lleguen las elecciones de vuelta me voy a poner del lado que estoy y ellos se van a poner del lado que están, pero los dos años de trabajo hay que tenerlos de la mejor manera”.

Por último, ante la pregunta de ZonaNorteHoy.com, el reelecto intendente se refirió al futuro político de Juntos por el Cambio, en su nuevo rol de opositor. Señaló que confía en que los dirigentes nacionales de su espacio político van a poder trabajar de la mejor manera para el bien de todos los argentinos y defender a los intendentes. Abella precisó que está muy concentrado en Campana y que los vecinos puedan vivir de la mejor manera,  y que deja en los legisladores de su fuerza política ese trabajo que cree lo van a poder hacer bien.