Turismo & Gastronomía

Miles de personas disfrutaron de la gastronomía gala en Plaza Francia

Miles de personas disfrutaron este fin de semana de los stands de comidas típicas, charlas sobre gastronomía y actividades culturales en Le Marché, una feria de cocina en Plaza Francia, con torre Eiffel incluida, organizada por el gobierno porteño con motivo de cumplirse hoy el 230° aniversario de la toma de la Bastilla.

Julie Boiteam, miembro de Lucullus, la asociación gastronómica gala en Argentina, dijo a Télam que el evento se realizó con el objetivo de difundir la cultura y la comida tradicional del país "en una fecha especial, al cumplirse 230 años de la Revolución Francesa”.



Boiteam estimó que más de 10.000 personas visitaron la feria este fin de semana.



Los principales restaurantes y panaderías con tradición francesa formaron parte de la feria Le Marché.



El público disfrutó de platos típicos salados y dulces, como el coq au vin, una especie de estofado -generalmente de pato- de los más tradicionales del país, o la french cookie, una galletita con crema de avellanas y manteca de maní.



“Nos enteramos ayer y acá estamos. La verdad que no conocía mucho la cocina francesa así que probé unos macarons, que son dulces. De paso aprovechamos y paseamos”, dijo Nicolás, que viajó desde la localidad bonaerense de Berazategui con su novia, Natalia.



Los productos más adquiridos por el público fueron los quesos y las tradicionales baguettes, entre lo salado, y los macarons y croissants, por el lado de lo dulce.



Graciela, que estuvo acompañada por su hija Verónica, destacó las distintas propuestas que encontraron en la feria.



“Aprovechamos para llevarnos un poco de queso y aceite de oliva, que son dos productos característicos de Francia”, contó.



Además, durante ambas jornadas se llevaron a cabo charlas sobre la gastronomía francesa a cargo de cocineros o productores.



“Vinimos especialmente para comer algo dulce porque nos encanta la cocina francesa”, afirmó Eduardo, en compañía de su esposa e hija.



Roxana, por su parte, estaba paseando con su esposo César por la Recoleta y se acercaron a la feria.



“Es la hora de la merienda así que seguramente compre algo dulce para comer pero recién comenzamos a recorrer la feria y no vi todo los puestos”, señaló la mujer.



Para los más chicos, la organización destinó un espacio para que puedan pintar y además instalaron una torre Eiffel a escala, realizada por el ingeniero José Luis Pino, para que la gente se sacara fotos. Télam.