Política

Intendentes del Grupo Dorrego proponen vacunar en un mes al 75% de la población de sus municipios

El espacio, que se amplió con la incorporación de más dirigentes políticos, impulsa una mayor inmunización contra el Covid-19 a través de sus propios medios.

Los jefes comunales PRO participaron de un nuevo encuentro realizado de manera virtual por el avance de los contagios, en el cual se analizó la situación de la pandemia junto a los nuevos integrantes del espacio que incorporó a más intendentes y ex intendentes como así también a legisladores nacionales y provinciales.



Durante la reunión, se acordó proponer al Gobierno de la Provincia de Buenos Aires la realización de un trabajo en equipo más intenso y coordinado entre los municipios, como así también, se estimó necesario el aceleramiento de los testeos para identificar posibles contagiados y aislarlos en forma automática. “De nada sirven medidas para limitar o restringir las actividades si no testeamos, aíslamos y vacunamos de manera intensiva”, expresó Jorge Macri.



Cabe destacar que todas las intendencias que componen el Grupo Dorrego cuentan con más de 320 vacunatorios entre hospitales, centros de salud, polideportivos y otros espacios municipales, con una capacidad de vacunación de 250 dosis diarias por vacunatorio. Esto implica poder inocular en un mes a 2.4 millones de bonaerenses que representan el 75% de la población de todos los municipios PRO. “Está claro que si compran más vacunas y dejan que los municipios ayuden en la campaña de vacunación es mejor para todos los vecinos de la provincia”, agregó el intendente de Vicente López.



En este sentido, se evaluó como prioritario vacunar con mayor intensidad (privilegiando a los adultos mayores y grupos de riesgo), intensificar la comunicación acerca de la responsabilidad social e individual (para cuidar a los vecinos y evitar contagios) y se consideró esencial que el Estado se ocupe de preservar el máximo posible la actividad, el trabajo y la educación presencial.



Participaron del encuentro, los siguientes jefes comunales, Nestor Grindetti (Lanús), Jorge Macri (Vicente López); Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Julio Garro (La Plata), Héctor Gay (Bahía Blanca), Ezequiel Galli (Olavarría), Javier Martinez (Pergamino), Pablo Petrecca (Junín), Guillermo Montenegro (Mar del Plata), Mariano Barroso (9 de Julio), Javier Iguacel (Capitán Sarmiento), Gustavo Peries (Ramallo), Francisco Ratto (San Antonio de Areco), Mariano Uset (Coronel Rosales), Lisandro Matzkin (Coronel Pringles), José Luis Zara (Patagones), Sebastián Abella (Campana), Camilo Etchevarrem (Dolores) y Jorge Etcheverry (Lobos); y los ex intendentes, Nicolas Ducote (Pilar) y Ramiro Tagliaferro (Morón).



Por su parte, se sumaron los diputados nacionales, Waldo Wolff y Natalia Villa; los diputados y senadores provinciales, Adrian Urreli, Daniel Lipovetsky, Fernando Rovello, Juan Fiorini, Veronica Barbieri, Franco Bagnato, Laura Ricchini, Mauricio Vivani, Guillermo Sanchez Sterli, Lorena Petrovich, Gustavo Velez, Gabino Tapia, Florencia Barcia, Carolina Barros Schelotto, Nidia Moirano, Santiago Nardelli, Carolina Piparo y Rosio Antinori.



Pero lo más bajo es que lo hagan desde el cinismo de una falsa proclama en defensa del trabajo, la educación y la libertad. Se aprovechan del dolor y la angustia de millones de argentinos y argentinas para fogonear sus consignas. Y lo hacen con total inmoralidad y caradurez, como si no hubiesen gobernado el país entre 2015 y 2019 de la manera en que lo hicieron.



Dicen que defienden el trabajo, cuando fundieron más de 25 mil Pymes, destruyeron más de 200 mil puestos de trabajo industriales, subieron el desempleo a dos dígitos y pulverizaron el salario de los argentinos y las argentinas.



Dicen que defienden la educación, cuando suspendieron el programa Conectar Igualdad que repartía netbooks a nuestros estudiantes, siendo el programa más completo del mundo en materia de reducción de la brecha digital y que ahora vemos con crudeza la desigualdad que eso implica.



Hablan de la inflación y del aumento de la pobreza después de romper la economía de la mayoría de los argentinos y las argentinas en base a un modelo de especulación económica y financiera, que llenó los bolsillos de sus amigos al mismo tiempo que empobrecía a la mayoría de los argentinos y argentinas a fuerza de tarifas de servicios públicos impagables.



Y por si esto fuera poco, endeudaron al país brutalmente, tomando solo con el FMI un préstamo de 45 mil millones de dólares que al día de hoy no pueden explicar dónde están.



Los argentinos y las argentinas seguiremos trabajando mancomunadamente y con solidaridad para hacerle frente a este difícil momento de nuestra historia. Ojalá reflexionen y decidan, por una vez, ponerse de verdad en el lugar del pueblo.