Pilar

Creen que la mujer degollada en Pilar fue violada y apuñalada por el empleado que también murió

La mujer hallada este miércoles degollada y con un cuchillo clavado en un ojo tras una explosión e incendio en una verdulería del partido bonaerense de Pilar tenía signos de abuso sexual y gran cantidad de puñaladas, y la principal hipótesis apunta a que fue asesinada por el empleado del comercio que murió a raíz de graves quemaduras en el mismo hecho, informaron fuentes judiciales y policiales.

Los voceros dijeron a Télam que Marcela Laura Hilarión (30) tenía a simple vista lesiones en la zona genital y las ropas arrancadas, lo que hace suponer que fue víctima de un ataque sexual, aunque eso se determinará con la autopsia.



Si bien inicialmente fue demorado el marido de la mujer y dueño de la verdulería, esta madrugada fue liberado al no existir por el momento indicios en su contra y no surgir del examen médico que tuviera algún tipo de herida, señaló a Télam una fuente judicial.



Es que, según las fuentes, la coartada del verdulero es firme, ya que aseguró que salió a hacer un reparto y cuando volvió atendió a una clienta y comenzó a escuchar el silbido de una garrafa y luego una explosión procedente de una pequeña cocina ubicada en el fondo del local.



Según su relato, cuando se acercó, se encontró con ese lugar cerrado con una puerta de madera y otra de rejas con un candado aparentemente desde adentro.



Para abrir la reja, el marido de Hilarión pidió ayuda a vecinos y rompieron el candado a mazazos, tras lo cual hallaron a la mujer desnuda, con gran cantidad de heridas y la llama de la garrafa le apuntaba a la cara.



Mientras tanto, el empleado, identificado como Rogelio Quispe, estaba prendido fuego y gritaba de dolor por las quemaduras, por lo que fue trasladado a un hospital cercano, pero poco después murió.



Para los pesquisas, todos los indicios apuntan al fallecido Quispe, quien trabajaba en la verdulería desde hacía unos cinco años.



Lo que los investigadores aún no tienen claro es si el hombre inició ese fuego con intenciones de borrar rastros y quedó atrapado, si fue un accidente o si su fin fue suicidarse, añadieron las fuentes.



Un dato clave para orientar la pesquisa fue el hallazgo de la llave del candado de la puerta debajo del cuerpo de la mujer -es decir que fue colocado desde adentro- y del celular de Hilarión, que había sido destruido previo al incendio, agregaron las fuentes.



“Era un día normal, como todos los días, con mi hermana estábamos bien, hablábamos, nos reíamos, hacíamos chistes con este chico (Quispe), que trabajaba acá hace como cinco años, aunque a veces faltaba”, dijo al canal TN Claudia Hilarión, hermana de la víctima.



Dijo que Quispe primero “coqueteaba” con Marcela y “la empezó a molestar, pero después le puso los puntos” y empezó a acosarla a ella.



Al respecto, contó que en una ocasión, el empleado concurrió a su casa y su madre “lo retó” porque utilizaba números de celulares diferentes a los que tenía para molestarla a ella.



Consultada sobre quién pudo haber matado a su hermana, Claudia respondió: “En realidad, no puedo decir con certeza si fue él o mi cuñado”.



En las últimas horas, la fiscal de la Unidad Descentralizada Especializada en Violencia de Género de Pilar, Carolina Carballido, dispuso diversas diligencias para esclarecer lo ocurrido y, si bien no descarta ninguna pista, la causa se orienta a la hipótesis de un femicidio seguido de suicidio.



El hecho se registró ayer a la tarde en el comercio ubicado en Gualeguaychú 2868, del mencionado distrito de la zona norte del conurbano.



Efectivos de la comisaría 7ma. de Pilar y bomberos de la zona acudieron a un llamado al 911 a raíz de un incendio en una verdulería que habría provocado la explosión de una garrafa.



Al llegar al lugar, el personal se entrevistó con el propietario del negocio, que le indicó que el estallido ocurrió en un cuarto trasero que estaba cerrado con un candado.



Cuando los efectivos ingresaron a esa habitación, encontraron a la esposa del dueño de la verdulería degollada y con un cuchillo clavado en el ojo izquierdo y al empleado con cerca del 90 por ciento de su cuerpo con quemaduras, por lo que dispusieron su traslado a un hospital, aunque murió. Télam.


Esta nota habla de: