La inflación mayorista se aceleró al 3,1% en agosto, el nivel más alto en más de un año
Según datos del INDEC, la inflación mayorista alcanzó en agosto el 3,1%, superando al 2,8% de julio y al 1,9% del IPC minorista. La suba estuvo impulsada por productos primarios y el impacto de la devaluación del dólar oficial.
La inflación mayorista volvió a acelerarse en agosto y se ubicó en 3,1%, el nivel más alto en más de un año, según informó este martes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). De esta manera, el indicador superó tanto al registro de julio (2,8%) como al del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que ese mes marcó 1,9%.
El dato refleja un mayor impacto del ajuste del dólar oficial sobre los precios mayoristas, ya que el índice tiene una elevada proporción de bienes transables vinculados al comercio exterior.
Nacionales e importados, con subas generalizadas
En detalle, los productos nacionales avanzaron 3,1% y los importados 2,9%. En el acumulado del año, el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) subió 15,7%, mientras que en la comparación interanual se disparó 22,1%.
El economista Gabriel Caamaño (Outlier) explicó que "sigue acelerando la inflación mayorista de la mano del ajuste del dólar, porque todos los componentes son transables y además el relevamiento es una foto al 15 del mes. La diferencia con el IPC radica en que ahora los productos nacionales suben incluso más que los importados".
Los rubros que más subieron
- Productos primarios: +4,4%
- Productos manufacturados: +2,8%
- Energía eléctrica: +0,1%
En paralelo, otros índices de precios mayoristas también reflejaron el aumento:
- El Índice de Precios Básicos al por Mayor (IPIB) subió 3,3%, con un fuerte incremento en productos primarios (+5,6%).
- El Índice de Precios Básicos al Productor (IPP) avanzó 3,5%, impulsado por los productos primarios (+5,9%), mientras que los manufacturados treparon 2,7%.
Perspectivas
Con este registro, la inflación mayorista confirma una tendencia alcista en línea con la presión cambiaria y marca una diferencia respecto al consumo minorista. Para los analistas, este dato anticipa que el traslado a precios al consumidor podría intensificarse en los próximos meses si se sostiene la dinámica devaluatoria.